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La importancia de la Bioseguridad en la Avicultura

Implementar medidas de prevención en las granjas avícolas es fundamental para garantizar la salud de las aves y evitar el ingreso de enfermedades mortales como la Influenza Aviar, para ello se requiere un enfoque integral como el de Una Salud .  

  • 09/04/2024 • 13:00

Por: Por Diego Delgado, del Área de Servicios Veterinarios de CEVA Salud Animal Cono Sur
Fotos: CEVA

El aumento constante de enfermedades que afectan a las aves, tanto a nivel nacional como mundial, ha generado una creciente preocupación. Entre estas enfermedades, la Influenza Aviar (IA) destaca como una de las principales amenazas, no solo por su impacto en las aves, sino también por su capacidad para afectar a mamíferos y humanos.

En los últimos años, la IA ha dejado una marca profunda en la industria avícola a nivel mundial, ocasionando pérdidas tanto económicas como sanitarias significativas. Por lo tanto, resulta crucial implementar medidas de prevención en las granjas avícolas con el fin de proteger a los animales, preservar la salud pública y mantener la viabilidad económica de los negocios.

La Influenza Aviar es una enfermedad que no estaba registrada en Argentina hasta el año pasado. Lamentablemente, con la llegada del virus al país en 2023, perdimos la condición de país libre de Influenza. Por suerte, en agosto del mismo año se pudo recuperar dicha condición, la cual se mantiene actualmente gracias a muchas medidas que se implementaron a nivel país, dentro de las cuales la bioseguridad fue, es y debe seguir siendo una herramienta clave para controlar este tipo de enfermedades tan agresivas para la industria.

En este contexto, la bioseguridad emerge como una herramienta fundamental que se aplica en todas las empresas avícolas con el objetivo de prevenir enfermedades como la IA. Dada la virulencia de este virus, que puede diezmar un plantel completo en cuestión de horas una vez introducido en una granja, la bioseguridad adquiere una importancia crucial, especialmente en un entorno donde la situación sanitaria puede cambiar drásticamente.

La bioseguridad hace referencia al conjunto de las tareas que se realizan en un establecimiento, siguiendo un detallado procedimiento operativo, con el fin de evitar la entrada de un patógeno, así como la diseminación a otras áreas productivas en caso de que haya ingresado.

Podemos hablar de tipos de bioseguridad: conceptual, operativa y estructural, las cuales interactúan permanentemente en cada tarea que se realiza en una granja. No hay una receta universal, pero sí conceptos generales que cada empresa tiene que adaptar a su situación particular, siempre respetando las normativas del SENASA y todas las reglamentaciones y actualizaciones vigentes relacionadas con la Influenza Aviar.

Las normas de prevención están reguladas por las resoluciones del SENASA, donde se detallan algunos de los puntos importantes:

  • Limitar el acceso a personas y vehículos a lo estrictamente necesario.
  • Aislamiento de las aves, galpones cerrados.
  • Control de plagas.
  • Desinfección de instalaciones y equipos.
  • Manejo de desechos y mortalidad.
  • Respetar las normativas vigentes.
  • Comunicación efectiva ante un brote.

El ingreso a la granja de personal autorizado debe cumplir con un estricto procedimiento de ingreso, cumpliendo con las normas establecidas por la empresa. Es fundamental un cambio de ropa y calzado para ingresar a un galpón. Se debe trabajar con el concepto TODO ADENTRO-TODO AFUERA. En caso de utilizar ropa descartable, debe ser eliminada antes de salir del establecimiento. En caso de no ser descartable, se debe cumplir con un protocolo de lavado y desinfección establecido para cada empresa.

Diferentes tipos de desinfección de calzado: seca y humedad. 

La desinfección de vehículos autorizados debe cumplirse en tiempo y forma. Cada empresa tendrá su protocolo de desinfección acorde a sus condiciones, pero siguiendo el mismo concepto universal: prevención y diseminación de enfermedades. Es tan importante el lavado como la desinfección posterior de un vehículo previo a su ingreso. Debemos contar con las herramientas necesarias (bombas, productos, mochilas, etc.) y un operario responsable para dicha tarea.

El control de plagas y de desechos es un punto clave a la hora de establecer un programa de bioseguridad. Debemos contar con operarios entrenados y capacitados. El control de plagas como moscas, roedores, aves silvestres, cascarudos, entre otras, pone en riesgo permanente a las aves de dicho establecimiento. Es clave cumplir con los procedimientos de control y monitoreo.


Ejemplos de plagas que deben ser controladas en cualquier establecimiento avícola.

No existen programas universales, pero sí conceptos universales

Si bien no es posible establecer un programa de bioseguridad único, ya que cada establecimiento tiene sus particularidades y variables, cada empresa debe adaptar su programa a sus necesidades. 

Como caso de éxito se describe que en CEVA Salud Animal hemos desarrollado nuestro propio protocolo que incluye medidas como la desinfección de vehículos y equipos, y la implementación de vacíos sanitarios entre visitas a distintas empresas. Asimismo, se resalta la importancia de adaptarse a los protocolos de bioseguridad de cada empresa, especialmente en lo que respecta al control de ingreso de personal y la comunicación eficiente sobre casos nuevos y medidas preventivas.

En conclusión, garantizar la salud de las aves requiere un enfoque integral como One Heath que incluya la aplicación rigurosa de medidas de bioseguridad, la comunicación fluida entre los actores involucrados y la rápida respuesta ante cualquier eventualidad. Solo de esta manera podremos proteger a nuestras aves, nuestra salud y la industria avícola en su conjunto.

Más información: 
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