Producción • INFORME ESPECIAL

El sector porcino inicia 2023 con expectativa y cautela

Con la mirada puesta en la disminución de la oferta de maíz y en la esperanza de buenos precios para el novillo, los productores pronostican un año con obstáculos a sortear pero con resultados positivos.

  • 21/02/2023 • 12:00

Por: M.V. Horacio Baldovino, Director en Check Farm, Agrosale S.A.S y Docente de la Cátedra de Producción de Porcinos y Pequeños Rumiantes de la FCV de Casilda, Universidad Nacional de Rosario. Coordinador Académico Jornada de Integración de la Cadena Porcina de Red Alimentaria.

Fotos: Red Alimentaria

Dejando de lado los vaivenes de la política en general, uno de los temas que a mi juicio va a ser de importancia y va a traer algunas consecuencias a corto plazo en el sector porcino es la sequía pronunciada en la zona núcleo que provocó un retraso en la siembra y una disminución considerable de la superficie sembrada de maíz. Como esto afectó también a los sustitutos de este cereal (sorgo y otros), la solución no va a ser fácil. El problema va a ser el empalme de la cosecha nueva con lo que quede de la anterior campaña (21/22).

En el plano internacional, sobresale la entrada de la PPA en el Caribe, en República Dominicana y Haití en julio del 2021, enfermedad que ya había ingresado en esa isla, La Española, en la década del 70. Muchos países, especialmente de norteamérica, empezaron a tomar medidas preventivas desde la aparición de la PPA en China debido al importante movimiento comercial con este país asiático y al gran tráfico marino desde este país en puertos especialmente sobre el Pacífico. Todos los países de la región tomaron medidas preventivas en mayor o menor grado.

Mucho antes de lo previsto por la mayoría de los pronósticos, China ya casi recuperó su stock porcino desde el brote de PPA en 2019 en el que se perdieron alrededor de 100 millones de cabezas. Las predicciones más optimistas hablaban de un período de al menos 5 años para que se recupere la producción a niveles anteriores al brote de la enfermedad en cuestión. Por consiguiente, y debido a la milagrosa recuperación, China disminuyó la demanda de carne importada y los precios internacionales bajaron.

Argentina arrancó el año pasado con un costo genérico de producción de $141 y un Índice Capón Máximo de $179 (Capón Promedio $151), una brecha aceptable para los que produjeron y comercializaron dentro de esos parámetros. Considerando que en el cálculo de dicho costo está incluida la amortización de las instalaciones (casi el 8% de este costo) que no intervienen en el flujo de fondos. Al finalizar el 2022 el costo de producción llegó a $284 (no olvidarse del “dólar soja”) con un Índice Capón Máximo de $307 (Capón Promedio $262). El dólar soja le puso más interferencias al negocio además de la expectativa de falta de maíz.

El 2023 será un año electoral, por lo que es probable que aparezcan algunas líneas de financiación, hubo en el mes de enero una reunión de entidades del sector porcino con el Ministro de Economía de la Nación en la que se anunció un sistema de  compensaciones a pequeños productores por el “dólar soja”, por lo que estamos a la expectativa de la reglamentación y de cómo deben registrarse para recibir dichas compensaciones que están destinadas a productores de menos de 1000 madres.

Por causa de la extensa y prolongada sequía, bajó la oferta de novillo pero más aun bajó la demanda y ya se está reflejando en el precio de la carne vacuna al mostrador y, esta vez, se está reflejando en el precio del cerdo en pie, tendencia que se espera que continúe firme durante este año. Por otro lado, ya se está revirtiendo la sequía y eso cambia el humor de los productores en general y alivia la tensión por el maíz.

Lo que se espera a nivel internacional es que por las condiciones naturales y por la menor presión de grupos ambientalistas, animalistas y veganos, el crecimiento de la producción porcina se va a dar fundamentalmente en América Latina en los próximos años. Se pronostica, y algo ya se está viendo, una disminución paulatina de los stocks y de la producción en Europa por las presiones de los consumidores y los grupos antes mencionados. La PPA sigue presente y en aparente calma con algunos brotes dispersos y ya se está hablando de una vacuna efectiva desarrollada por un instituto chino.

Para este año, en Argentina, los temas vertebrales, al menos en la primera mitad del año van a ser la disminución de la oferta de maíz por un lado y el pronóstico de buenos precios para el novillo traccionando hacia arriba al precio del cerdo por el otro.