Entre el 13 y el 15 de enero de 2022, una ola de calor provocó la muerte de unas 400.000 gallinas en Uruguay. Por ese motivo, el Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca (MGAP) del país sudamericano, extendió la emergencia agropecuaria, que ya regía por causa del déficit hídrico, para el sector avícola. El director General de la Granja, Nicolás Chiesa, resaltó que esto permitirá que la cartera comience a trabajar con las gremiales en medidas de apoyo para paliar la situación que viven. De acuerdo con esto, puntualizó que, por medio del Fondo Agropecuario de Emergencia, “se destinarán fondos en especial para líneas de crédito que ayuden “a recomponer la actividad productiva” y agregó que “la afectación es histórica”. Según el directivo, hubo productores que en esos días perdieron 60.000 o 70.000 dólares. Por su parte, el presidente de la Asociación de Productores Avícolas Sur, Joaquín Fernández, afirmó que la producción “bajará entre un 10 y un 12 por ciento” y explicó que las pérdidas -solamente en animales- son de aproximadamente 1,5 millones de dólares. Al ser consultado por las consecuencias que deberán afrontar los consumidores, Fernández apuntó que el país sudamericano no se verá desabastecido, aunque resaltó que el precio de los huevos tendrá una subida que será “razonable” y no “abusiva”. Los pequeños productores rurales de Uruguay ya se encuentran recibiendo en estos momentos diferentes ayudas por parte del Gobierno para paliar las dificultades del déficit hídrico que llevó a que Uruguay decretara la emergencia agropecuaria en diciembre de 2021. Fuente: Hola News